El presidente de Cainco, Jean Pierre Antelo, dijo que la práctica de cada 1 de mayo sea basada en diálogo, análisis y sostenibilidad. Propone una política laboral del siglo XXI.
La Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco) propuso una agenda de cuatro puntos, a pocos días de celebrarse el 1 de mayo, cuando tradicionalmente el Gobierno decreta el incremento salarial al haber básico y al mínimo nacional.
En conferencia de prensa realizada la tarde de este lunes, el presidente de Cainco, Jean Pierre Antelo, dijo que “cada primero de mayo, Bolivia repite el mismo anuncio: un incremento salarial decretado de forma unilateral. Esta práctica, que debería representar justicia para el trabajador, se ha vaciado de diálogo, análisis y sostenibilidad”.
El 13 de marzo pasado, la COB entregó al Gobierno su pliego petitorio 2025, mediante el cual pide un incremento salarial del 15% al mínimo nacional y 20% al haber básico, tras sostener una reunión con el presidente del Estado, Luis Arce. El sábado, la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) advirtió sobre los “efectos catastróficos” que tendría sobre la economía boliviana, si se aprueba el pedido que plantea la COB.
Afirmó que Bolivia atraviesa una de sus coyunturas económicas más complejas: reservas internacionales agotadas, déficit fiscal persistente y una inversión estancada. “Frente a este escenario, aplicar recetas del pasado no solo es ineficaz, es irresponsable. Más del 80% de los bolivianos trabaja en la informalidad, sin protección ni representación real. Insistir en ajustes salariales sin productividad ni diálogo solo agrava la informalidad y debilita el empleo”, aseveró Antelo.
Al mismo tiempo, señaló que el verdadero debate no es solo salarial. Es laboral. “Necesitamos una política laboral del siglo XXI que combine tres pilares: flexibilidad, estabilidad de ingresos y capacitación continua”.
La agenda que propone Cainco:
- Congelar el salario del sector público, salvo en salud, educación y seguridad, para contener el déficit.
- En lo privado:
- Permitir negociación salarial sectorial en el ámbito privado, basada en datos.
- Congelar el salario mínimo nacional por los efectos negativos que ha tenido en el empleo formal.
- Estímulos reales a la contratación formal, con incentivos para empresas e industrias que brinden oportunidades laborales, priorizando a los jóvenes y a las mujeres.
- Instalación urgente de una mesa nacional tripartita (Estado, trabajadores y empleadores) para construir una nueva política laboral.
El presidente de Cainco consideró que no se puede seguir legislando el trabajo del futuro con lógicas del pasado. “Bolivia necesita decisiones valientes, con visión de largo plazo y centradas en la realidad de quienes trabajan, arriesgan y emprenden en el país. Desde Cainco, reiteramos nuestro compromiso con una política laboral moderna, inclusiva y basada en el diálogo. Bolivia necesita una política laboral del siglo XXI con los pies en la tierra, pero con la mirada siempre en el futuro”, agregó el dirigente empresarial.
Fuente: El Deber