La cosecha de soya de verano 2024-2025 registró buenos rendimientos en diferentes zonas productivas. En la Chiquitania se obtuvo el rendimiento más alto con un promedio entre 3,5 a 4 toneladas por hectárea, lo cual demuestra que los suelos son muy productivos en dicha zona.
Juvenal Bonilla, presidente del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Bolivia (CIAB), dio a conocer que en base a datos de las expendedoras de insumos y profesionales agrónomos que trabajan en campo; se tienen datos importantes con relación a la campaña de verano soya.
Indicó que en el presente verano se cultivaron alrededor de 1,2 millones hectáreas de soya, de las cuales 650.000 hectáreas están en la zona Este, 300.000 en el Norte y 250.000 hectáreas en la Chiquitania.
En el verano se llegó a un rendimiento de 4 toneladas
Bonilla manifestó que la campaña de verano 2024-2025 ha sido buena en relación a los rendimientos alcanzados, siendo en municipios de la Chiquitania donde se llegó a producir hasta 4 toneladas de soya por hectárea.
“En la Chiquitania se está obteniendo la mejor productividad de soya en Bolivia. Se está hablando de 3,5 a 4 toneladas por hectárea”, indicó Bonilla, quien agregó que dichos rendimientos obtenidos en municipios de San Ignacio de Velasco, Concepción y San José de Chiquitos, es porque son suelos nuevos abiertos al cultivo de soya.
Explicó que en la zona se hacen correcciones de suelos y el uso de fertilización, lo cual ayuda a lograr buenos rendimiento del grano.
Si bien en la Chiquitania se obtienen buenos rendimientos, pero también el costo de producción de soya supera los 1.000 dólares por hectárea, muy superior a los costos de otras zonas.

Manifestó también que en la Chiquitania se caracteriza por tener suelos muy porosos, lo cual permite el ingreso de maquinarias el campo a pesar de condiciones difíciles por exceso de agua. Eso permite sembrar el grano de manera uniforme y no hay problemas de encharcamiento como en otras zonas.
Otras zonas con menos rendimientos
En la zona Este, el rendimiento promedio fue de 1,8 toneladas por hectárea, mientras que en el Norte los productores obtuvieron rendimiento promedio entre 2 a 2,2 toneladas de soya por hectárea.
La Chiquitania con potencial para seguir creciendo
Bonilla recordó que, en el 2014, un estudio realizado por el CIAB da cuenta que en la Chiquitania existe alrededor de un millón de hectáreas aptas para sembrar soya debido a su gran potencial que tiene.
“Hay aproximadamente un millón de hectáreas que se pueden desarrollar en la Chiquitania, y que están permitidas dentro del Plan de Uso de Suelos (PLUS) de Santa Cruz. Son tierras de textura franco arcillosas y franco arenoso que permiten buen drenaje y alta porosidad, que hace favorable trabajar en dichas tierras”, concluyó.
Fuente: Agro Sinergia
