n un año la exportación de carne bovina pasó de $us 144 millones a $us 154,7 millones. En agosto de 2025 China alcanzó un nuevo récord de compra mensual de carne con un volumen de 7.184 toneladas. Perú y Ecuador son otros compradores de carne.
Entre enero y septiembre de 2025 la exportación de carne bovina alcanzó un valor de $us 154.7 millones, esto según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Ese monto es un 5,7% superior a lo exportado de enero a septiembre de 2024, cuando el valor fue de $us 144 millones.
Junio fue el mes donde más divisas ingresaron al país por la exportación de carne, de enero a septiembre de 2024, con un valor de $us 26.3 millones. En cambio, en 2025, en agosto se tuvo más ingresos con un valor de $us 35.8 millones, seguido por julio con $us 33.2 millones.
Durante los primeros nueve meses de 2025, China ha sido el mayor comprador de carne boliviana con 29.812 toneladas por un valor de $us 140.5 millones.
Desde que se hizo la primera exportación en 2019, en agosto de 2025 por primera vez China alcanzó un récord de compra de 7.184 toneladas. Nunca antes había llegado a ese volumen de compra.
El anterior volumen más alto de compra se registró también en 2025, concretamente en julio, con un volumen de 6.519 toneladas. La primera vez que se exportó carne a China fue en septiembre de 2019, con apenas 356 toneladas.
Con la apertura del mercado chino, el gigante asiático se ha convertido en el mayor comprador de carne boliviana. Mientras en 2019 el volumen total de la exportación de carne fue de 1996 toneladas, en 2024 se alcanzó un volumen de 40.061 toneladas.
Otros países que compran la carne boliviana son Perú y Ecuador, en menores volúmenes que China, claro está.
El precio de la carne en Bolivia se encuentra en el ojo de la tormenta porque ya casi se ha duplicado. Al consumidor final el kilogramo de carne de primera se vende entre Bs 70 y Bs 75, mientras que la de segunda supera los Bs 60.
Los carniceros culpan a la exportación y al contrabando por la subida del precio, por eso se encuentran en emergencia.
En las pensiones ya casi ha desaparecido del menú la carne de res en pulpa o chuleta, predomina el pollo y las menudencias de los bovinos, tales como el hígado y la panza.
Fuente: El Mundo
