Entre Ríos participa del Comité Técnico Interinstitucional para coordinar vigilancia, diagnóstico y manejo de Orobanche cumana. La acción busca evitar la entrada y establecimiento de esta maleza que ya afecta cultivos en Sudamérica.
En el marco de la alerta fitosanitaria nacional, expertos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca participaron de la reunión del Comité Técnico Interinstitucional sobre Orobanche cumana, conocida como jopo del girasol, plaga que afecta los cultivos en distintas regiones de Sudamérica.
El objetivo del encuentro, convocado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) bajo la Resolución 1347/2024, fue coordinar acciones de prevención, vigilancia, diagnóstico y manejo ante el riesgo de ingreso y establecimiento de esta maleza parásita en Argentina.
En representación de Entre Ríos estuvo la técnica de la Dirección de Agricultura, María Fernanda Retamar. También participaron autoridades de la Dirección Nacional de Protección Vegetal, ministerios de Agricultura provinciales, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Asociación de Semilleros Argentinos, la Asociación de Cultivos Extensivos, técnicos y referentes del sector productivo de girasol.
Durante la reunión se presentó un panorama actualizado de la situación de Orobanche cumana en Sudamérica. Aunque la plaga aún no se ha detectado en Argentina, su presencia en Bolivia representa una amenaza cercana, lo que motiva el refuerzo de controles en fronteras, la fiscalización de semillas importadas y el monitoreo en las zonas productoras.
Los técnicos del Senasa y del INTA detallaron los lineamientos de trabajo, que incluyen protocolos de vigilancia y muestreo, capacitación de inspectores y técnicos para la identificación de la maleza, y un sistema de notificación inmediata ante sospechas en campo. Además, se avanzará en la validación de métodos de diagnóstico de laboratorio y en la estandarización de procedimientos para la confirmación de casos.
Se subrayó la importancia de reforzar medidas cuarentenarias y preventivas, especialmente en lo relativo a la importación de semillas y al movimiento de maquinaria agrícola, implementando protocolos de limpieza y desinfección que eviten la diseminación accidental de semillas contaminadas.
El comité también debatió estrategias de manejo en caso de detección, priorizando el uso de híbridos resistentes, la rotación de cultivos y la eliminación temprana de focos. Asimismo, se acordó la elaboración de un plan de acción interinstitucional que contemple investigación, capacitación y comunicación, incluyendo materiales técnicos y de divulgación para productores.
Las provincias comprometieron recursos humanos y técnicos para la vigilancia local, mientras que el Senasa actuará como organismo coordinador y punto de referencia para la recepción de denuncias.
Los especialistas coincidieron en que la detección temprana y la acción coordinada son clave para evitar el ingreso y establecimiento de Orobanche cumana, protegiendo la sanidad y la competitividad del cultivo de girasol argentino.
Fuente: Revista Chacra