Luis Alberto Alpire, economista y agrometeorólogo, realizó un análisis de la situación de las campañas agrícolas de maíz, y basado en datos de instituciones del agro concluyó que durante el 2024, nuestro país enfrentará un déficit de 600 mil toneladas del grano amarillo.
La cosecha del maíz en el Chaco Boliviano hasta junio ha generado un rendimiento menor a lo esperado. Lamentablemente las lluvias no fueron suficientes, como también las bajas temperaturas que llegaron a 0 °C durante mayo, causaron un impacto negativo en el cultivo, incidiendo en una disminución de la productividad que a lo sumo llegará a 2.5 TN/Ha, como promedio, cuando concluya la recolección integra del grano hasta finales de julio del total de las 70 mil Ha sembradas en esta región, según lo manifestado por el presidente de Promasor, producción que alcanzaría aproximadamente a 175 mil TN.
Asimismo, si consideramos las 110 mil Ha que se han sembrado en las diferentes regiones de Santa Cruz, Beni, Tarija y Chuquisaca, aplicando con criterio optimista el mismo rendimiento, en virtud a que por ejemplo en el Chaco ha llovido más que en la Chiquitania durante este primer semestre, implicaría que la producción de maíz en el país solo alcanzaría a 450 mil TN, muy distante de la demanda nacional anual que representa 1.3 millones de TN, desglosada en 800 mil TN por los avicultores y 500 mil TN como alimento suplementario, para las cadenas de producción de carne de cerdo como de bovino, además de leche. Concluyendo en un faltante estimado para esta gestión de 850 mil TN, que sería cubierto parcialmente con las 255 mil TN de maíz stockado en los silos según lo informado públicamente por Emapa, restando un déficit definitivo de aproximadamente 600 mil TN en el 2024.
En ese sentido, hoy más que nunca se necesita producir más y mejor para abastecer el mercado interno en una coyuntura donde el proveedor natural de maíz, nuestro vecino Argentina, generalmente por la vía de contrabando ha sido afectada también por el fenómeno El Niño. Además, de la plaga chicharrita con una pérdida total de 7 millones de TN, y que, si sumamos el hecho que este país viene aplicando serios ajustes a su economía, la suma de estos factores incidirá en un aumento significativo del precio de este grano fundamental en la dieta alimenticia de los bolivianos.
Corresponde, por tanto, para no depender de terceros países en la provisión de alimentos esenciales como el pollo, huevo, carne de cerdo como de bovino además de leche, recurrir a la biotecnología a través del evento apilado RR + BT de maíz, genéticamente modificado, tolerante a herbicidas y el gusano cogollero con rendimiento promedio de 5 TN/Ha en Argentina, Brasil y Paraguay, en comparación con nuestro país con solamente una producción de 2.5 TN, como media en los últimos años.
Fuente: Luis Alberto Alpire, Agrometeorólogo