Por Vilquer Suárez
El sector productivo observa importante que al ser Bolivia miembro del Mercosur, debería aprovechar acceder a la información de estos países para homologar eventos genéticamente mejorados de diferentes cultivos, de manera que sean aprobados lo antes posible y utilizados por productores bolivianos.
El uso de biotecnología es un pedido del sector agropecuario desde hace muchos años, y ahora esperan que sea aprobado en corto plazo tomando en cuenta que es un tema de prioridad para los productores. Además, que las mesas técnicas entre instituciones agropecuarias y el Gobierno avanzan con la intención de dar soluciones a las demandas del sector productivo.
Una de las propuestas de las instituciones del agro durante la reunión con los ministros de Economía y de Desarrollo Rural realizada el lunes 8 de julio en Santa Cruz, es la homologación de semillas de soya, maíz, trigo, caña de azúcar y algodón, de manera que pueden ser utilizadas en los campos bolivianos en corto plazo.
Así dio a conocer Jaime Hernández, gerente general de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), quien indicó que el sector productivo hizo conocer a los ministros del área la preocupación de los productores porque no pueden usar semillas mejoradas, lo cual se dificulta en la producción. Además, que Bolivia no puede competir con países del Mercosur, del cual nuestro país es miembro.
“Es difícil competir con los países de Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay; por eso es fundamental que también se nos dé las mismas herramientas tecnologías que tienen los países del Mercosur”, expresó Hernández.
En ese sentido, el sector pidió el Gobierno homologar los eventos aprobados en los países citados, de manera que los productores bolivianos también tengan acceso a la biotecnología.
Hernández recordó que, en soya, se pueden aprobar los eventos HB4, tolerante a sequía e Intacta, tolerante a plagas. En maíz el evento BT+RR, en trigo el evento HB4 tolerante a sequía. Además de eventos en algodón.
“Hemos pedido al Gobierno que evalúen la homologación de semillas mejoradas de estos cultivos y nos den respuesta en la próxima reunión, programada para el 29 de julio”, indicó Hernández.
Fernando Azturizaga, asesor del directorio de Anapo, quien estuvo presente en la reunión con los ministros, indicó que presentaron el análisis tecnológico y legal para hacer posible la validación y homologación de eventos genéticamente modificados en semillas para la producción de soya, algodón, maíz, trigo y caña de azúcar.
Ingreso de Bolivia al Mercosur puede facilitar homologación de semillas
Asturizaga manifestó que al ser Bolivia parte del Mercosur, las autoridades de los Ministerios de Agricultura y Medio Ambiente pueden solicitar la información que tienen sus homólogos de Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay; de manera que la información sobre riesgo, ambiental y productiva realizada en otros países sean trasladas a nuestras autoridades.
“En función de esa información que se viene estudiando por más de 20 años puedan homologarse estas semillas genéticamente modificadas en Bolivia. Esto es posible legalmente porque tanto el protocolo de Cartagena y el reglamento de Bioseguridad de Bolivia permiten hacer una evaluación documental de estos elementos que analizan un historial de uso seguro”, explicó Azturizaga.
Indicó que el evento de soya Intacta usado más de 20 años en Brasil y Argentina puede ser aprobado de manera rápido en Bolivia, para que sean utilizados por productores de Bolivia y la soya no sea afectada por plagas e insectos.
“El ingreso de Bolivia al Mercosur y teniendo convenios de intercambio tecnológico con Brasil, podríamos acceder a esa información y validar de manera rápida estos eventos, de manera que en el verano próximo podamos iniciar la siembra para adaptar a nuestros suelos en Bolivia”, aseveró Asturizaga, quien agregó que las semillas Intacta en Soya y HB4 pueden homologarse en corto plazo, toda vez que vienen siendo utilizadas en otros países, por lo cual se pueden validadas agronómicamente en la campaña de verano 2025 e invierno del mismo año. Eso permitiría que ya estarían disponibles el 2026 en la siembra de suelos en Bolivia.
Con la biotecnología aumentarán las exportaciones
Anapo estima que, con la aprobación de la biotecnología, en caso de soya las exportaciones pasarían de 1.800 millones de dólares a 3.500 millones de dólares, generando divisas para el país.
La sequía afectó significativamente las campañas de verano e invierno, lo que significa menos producción de granos para Bolivia. El panorama de cara a la campaña de verano 2024-2025 es incierto, toda vez que los productores enfrentan perdidas cuantiosas por el efecto climático.
Fuente: Agro Sinergia