La Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) anunció que proyecta comercializar más de 80 mil quintales de arroz este mes, habiendo alcanzado ya la venta de 41 mil quintales en la primera quincena de junio, según informó su gerente general, Franklin Flores.
Desde el 1 al 14 de junio, Emapa logró distribuir 41 mil quintales de arroz en bolsas arroberas a un precio de 50,50 boivianos, como medida para enfrentar la especulación en el mercado. “Prevemos superar los 80 mil quintales solamente en junio”, declaró Flores, destacando el significativo aumento en comparación con las ventas promedio mensuales, que usualmente rondan los 23 mil quintales. Este incremento en la demanda se triplicó a más de 60 mil quintales en mayo, una cifra sin precedentes en las tiendas y supermercados de Emapa.
Atribuyó la estabilidad de los precios a las políticas estatales, las cuales han logrado contener la demanda, que ha disminuido un 30 por ciento en el número de clientes atendidos diariamente, pasando de 100 a 70 personas. Esta reducción en la demanda también se debe a la implementación de ferias móviles en barrios urbanos y rurales, ofreciendo arroz a un precio accesible de 50,50 bolivianos por bolsa de una arroba.
El Gobierno, en días recientes, identificó una fuerte ola especulativa en el mercado del arroz y otros productos, provocada por problemas en Brasil, debido a inundaciones, y en Argentina, por alta inflación. Esta situación fue aprovechada por contrabandistas que exportaron ilegalmente el arroz boliviano a mercados fronterizos para venderlo a precios elevados. En respuesta, el Gobierno intensificó los controles para frenar el contrabando.
Producción nacional
Datos del Ministerio de Desarrollo Productivo revelan que Bolivia produce 851.965 toneladas de arroz en chala (con cáscara) y consume 828.405 toneladas, lo que resulta en un superávit de 23.560 toneladas. Esta capacidad de producción permite a Bolivia no sólo satisfacer su demanda interna sino también disponer de un excedente, aunque la especulación y el contrabando plantean desafíos significativos para la estabilidad del mercado.
Fuente: Los Tiempos