Las últimas lluvias favorecieron al desarrollo del cultivo de maíz en la zona Sur del departamento de Santa Cruz. Sin embargo, la producción del grano amarillo solo llegará a 500 mil toneladas, lo cual significa que no se cubrirá el requerimiento interno, estimado en 1,3 millones de toneladas.
Mario Moreno, presidente de la Asociación de Productores de Maíz y Sorgo (Promasor), indicó que en el Chaco cruceño solo se sembraron 50.000 hectáreas y sumadas a área cultivadas en el Chaco tarijeño y chuquisaqueño y otras zonas del departamento de Santa Cruz se estiman unas 180.000 hectáreas, con las cuales solo se producirán 500 mil toneladas de maíz en la presente gestión.
Moreno indicó que la demanda interna es de 1,3 millones de toneladas de maíz al año, lo cual significa que se registrará un déficit de 900 mil toneladas del grano.
Comentó que los productores necesitan usar la biotecnología para aumentar su productividad, pero ello debe ir acompañado con capacitaciones a los productores para lograr buenos rendimientos y generar excedentes exportables del maíz.
“Si aplicamos la biotecnología vamos a lograr alta producción de Muñiz y vamos a cubrir el mercado y tener excedentes del grano”, expresó Moreno.
El 70% de la producción de maíz es con la variedad “Betito”
El titular de Promasor dio a conocer que algunos productores de algunas zonas maiceras usan semillas que son producto de un cruzamiento entre una semilla genéticamente modificada con un hibrido de maíz, del cual sale un maíz Betito, que puede resistir a los gusanos.
“Este maíz reíste a los gusanos y el grano rinde más. Con un hibrido normal se saca entre 70 a 80 quintales por hectárea, con el Betito algunos productores menonitas llegan hasta a obtener hasta 140 quintales de maíz por hectárea”, explicó Moreno.
Comentó que estos materiales ingresan de Argentina, y las instituciones como el Senasag e Iniaf no hacen el respectivo control para evitar el ingreso de semillas ilegales.
“Antes el Iniaf hacía un buen control de ingreso de semillas ilegales, pero ahora que la institución está centralizada no hace la labor que antes era efectiva. Hay tanta contaminación de estos granos ilegales, han ocasionado que seamos invadidos con muchas malezas y eso es por el ingreso de semillas ilegales”, expresó Moreno.
Comentó que al menos el 70% de la producción de maíz es con la variedad Betito, porque además su costo es de Bs 300 un saco de 20 kilos para una hectárea. Sin embargo, un maíz genéticamente mejorado legalmente tiene un costo de hasta 200 dólares para sembrar una hectárea.
Fuente: Agro Sinergia